Los niños han sido siempre el motor y el estímulo de nuestro proyecto: nuestro amor hacia ellos y las enormes ganas de querer mejorar la educación y contribuir desde la educación a su desarrollo y bienestar.
Año tras año, nos sentimos orgullosos de comprobar su crecimiento y de constatar su autonomía, con la que ya han comenzado a leer, a pronunciar las primeras palabras en inglés y español, a escribir, a emplear las matemáticas. Y, sobre todo, a expresarse mejor y a respetar, querer y compartir con otros niños.
Estamos satisfechos de comprobar los resultados cuando cierran su etapa en nuestro centro y pasan a 3P, una etapa a la que llegan con confianza y con los conocimientos necesarios para seguir aprendiendo y para seguir escribiendo la historia de sus vidas.